Norma Romero Cortés es la notaria del pueblo. Así se juzga ella misma y tiene antecedentes para comprobarlo: heredera de una tradición familiar de la que se siente orgullosa, hoy la abogada responsable de la notaría 4 destaca el trabajo de organización ciudadana que ha emprendido desde hace años.
A través de asociaciones, Norma Romero pretende devolver el poder a los ciudadanos, pero no bajo las condiciones de un clásico eslogan político, sino bajo un concepto real: construir ciudadanía desde la organización y la inteligencia.
Sin aspavientos, Norma Romero destaca su tradición familiar, la herencia de su padre Jorge Romero Vargas a quien desea homenajear con su trabajo.
En ese sentido, la notaria afirma que ha tratado de inculcar los mismos valores en sus hijos. “Hoy ya puedo gozar de la tranquilidad de haber sembrado lo que sembré en mis hijos y que me acompañen a esta aventura para que formemos más y mejores ciudadanos. Hay que dar ejemplo y el ejemplo arrastra, si estoy en esto es porque sigo los pasos de mi padre”.
