Una reunión que no sucedió: los planes de Mújica y Francisco que se truncaron con la muerte

Una reunión que no sucedió: los planes de Mújica y Francisco que se truncaron con la muerte

Foto: Xinhua

A pesar del cáncer de esófago que lo aquejaba, José Mujica mantuvo su agenda pública hasta donde la salud se lo permitió, y tenía la intención de tener una conversación final con el papa Francisco, a quien admiraba, aunque nunca compartió su fe.

 

Mujica murió el martes a los 89 años,  tres semanas después del fallecimiento de Francisco. Sin embargo, la coincidencia no fue solo cronológica, ya que ambos compartían una mirada crítica sobre el mundo, una preocupación por los jóvenes y una forma sencilla de ejercer la autoridad.

 

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No era la primera vez que Mujica buscaba ese tipo de diálogo, puesto que ya había visitado el Vaticano en dos ocasiones: una en 2013, siendo presidente, y otra en 2015, poco después de dejar el cargo. La tercera, que habría cerrado un ciclo personal y político, quedó trunca.

 

Es una posibilidad si la salud me lo permite. Todo va a depender de los médicos”, aseguró Mujica tras ser cuestionado sobre si visitaría nuevamente el Vaticano. Pero también dejó claro su interés: “Sería importante por la voz que significa el papa en el mundo. Si puedo, lo voy a hacer. Y si no, veremos”.

 

En una entrevista televisiva, Álvaro Padrón, su asesor internacional, relató que Mujica escribió una carta al Vaticano y recibió una respuesta casi inmediata. "Veinte minutos después, el teléfono de Mujica sonó y del otro lado de la línea estaba el papa Francisco", comentó Padrón.

 

“Lucía atendió y era el papa llamando a Pepe. Le dijo, con mucha confianza, que se dejara de preocupar, que iba a estar bien, que fuera a visitarlo para conversar un par de días”, recordó Padrón.

 

La idea era que pasaran dos días juntos para conversar sobre la humanidad y la política, pero la salud no se lo permitió, primero se agravó la condición de Mujica; luego, la de Francisco, por lo que ambos murieron sin poder concretar el encuentro.

 

Tras la muerte del papa, Mujica aseguró que “vivía en sintonía con el viejo mensaje cristiano” y que quizá le faltó tiempo, compañía o fuerzas para continuar su lucha.

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