
Un reciente estudio publicado en npj Viruses ha revelado el hallazgo de 230 virus gigantes previamente desconocidos, identificados en muestras oceánicas mediante análisis metagenómicos. La investigación fue desarrollada por expertos de la Escuela Rosenstiel de Ciencias Marinas, Atmosféricas y de la Tierra de la Universidad de Miami, en Estados Unidos.
Los virus gigantes desempeñan un rol crucial en los ecosistemas acuáticos, principalmente al infectar organismos unicelulares, entre algas y amebas, elementos fundamentales en las cadenas alimentarias marinas. Durante el proceso, introducen su material genético en las células huésped y modifican su metabolismo, lo que puede incidir directamente en fenómenos como las floraciones de algas nocivas, conocidas como blooms.
A partir del análisis de datos genéticos tomados en mares y océanos de todo el mundo, los investigadores desarrollaron una herramienta informática, Beren (Bioinformatic tool for Eukaryotic virus Recovery from Environmental metagenomes). Herramienta fue diseñada para facilitar la detección de estos microorganismos en grandes bases de datos ambientales aplicada a datos metagenomicos provenientes de nueve bases públicas.
El coordinador del estudio, Mohammad Moniruzzaman, explicó que comprender cómo los virus gigantes interactúan con algas y microbios oceánicos permitiría anticipar y controlar floraciones algales. Si comprendemos mejor la diversidad y el papel de los virus gigantes en el océano podemos predecir y, con el tiempo, gestionar las floraciones de algas nocivas, que suponen un peligro para la salud humana en Florida y en todo el mundo.
Dicho estudio también reveló la existencia de proteínas codificadas por estos virus que podrían estar vinculadas con procesos de fotosíntesis. Un hallazgo que amplía el conocimiento sobre la influencia de estos microorganismos en los ciclos biogeoquímicos del océano Según Benjamin Minch, primer autor del estudio, los hallazgos representan una mejora significativa en las herramientas de detección dentro del trabajo para el monitoreo ambiental: "Este estudio nos ha permitido crear un marco para mejorar las herramientas existentes para detectar nuevos virus [...] lo que podría mejorar nuestra capacidad de controlar la contaminación y los patógenos en nuestras vías fluviales". (NotiPress)