
El presidente del Congreso de Perú, el parlamentario José Jerí, asumió este viernes como nuevo jefe de Estado del país tras la destitución como presidenta de Dina Boluarte, ejecutada por el pleno del Legislativo.
"En cumplimiento con lo establecido en el artículo 115 de la Constitución Política, el titular del Parlamento, José Jerí Oré, juró como presidente de la República", indicó el Legislativo a través de su cuenta en X.
Este viernes, el pleno del Congreso votó favorablemente un pedido de destitución contra Boluarte, impulsado por grupos mixtos de parlamentarios.
El pedido se sustentó por la causal constitucional de incapacidad moral permanente para ejercer la presidencia de la ahora exmandataria Boluarte, a causa de su ineficiencia para combatir la grave crisis de criminalidad que vive el país.
Jerí, abogado de 38 años, asumió la presidencia del Congreso en julio de este año, siendo miembro de la bancada del partido Somos Perú (derecha).
Por sucesión constitucional, cuando el Congreso destituye a un jefe de Estado, quien debe reemplazarlo es el presidente del parlamento, y a su vez, el primer vicepresidente del parlamento debe asumir la presidencia del Legislativo.
Tras el nombramiento de Jerí como nuevo presidente del Perú, el presidente del Congreso pasa a ser el parlamentario Fernando Rospigliosi, quien se desempeñaba como primer vicepresidente y es miembro de la bancada de Fuerza Popular (fujimorista, derecha).
Mientras Jerí asumía la presidencia en la sede del Congreso, la saliente mandataria Dina Boluarte ofreció un mensaje a la nación en el que hizo un recuento de los presuntos logros alcanzados en diversos ámbitos durante su gestión.
Boluarte no hizo mención a su destitución ni tampoco la puso en tela de juicio.
Jerí estuvo envuelto en una investigación por presunta violación sexual de una mujer, ocurrida en diciembre de 2024.
Sin embargo, en agosto de este año, el fiscal Tomas Gálvez archivó la investigación alegando falta de pruebas.
Gálvez fue nombrado en septiembre como fiscal general interino, y es investigado por la fiscalía por ser presunto miembro de una mafia que operaba al interior del sistema judicial, la cual traficaba con nombramientos de jueces y arreglo de sentencias.
Tras su destitución, Boluarte deberá enfrentar las investigaciones fiscales que tiene por presuntos delitos de corrupción, así como por presuntas violaciones contra los derechos humanos cometidos durante su mandato, el cual inició en diciembre de 2022.
Por su parte, Jerí ejercerá la presidencia de Perú hasta el 28 de julio de 2026, cuando asuma un nuevo mandatario elegido en los comicios generales de abril del próximo año.