El Congreso de Estados Unidos aprobó un acuerdo que puso fin al cierre federal más largo en la historia del país, reanudando funciones gubernamentales tras 43 días de paralización. La ley fue promulgada por el presidente Donald Trump el miércoles 12 de noviembre por la noche, dos horas después de que la Cámara de Representantes autorizara reactivar servicios esenciales, pagar sueldos a trabajadores federales y restaurar la asistencia alimentaria.
La reapertura federal estuvo asegurada con una votación de 222 a 209 en la Cámara, con seis demócratas uniéndose a la mayoría republicana. En el Senado, el respaldo de ocho senadores demócratas resultó clave para destrabar el proyecto. Trump calificó la medida como una "gran victoria" y declaró: "Solo quiero decirle al pueblo estadounidense que no olvide esto" . Añadió: "esta no es forma de gobernar un país. Espero que todos estemos de acuerdo en que el gobierno nunca más debería cerrar".
El shutdown, que comenzó a mediados de septiembre, interrumpió operaciones en agencias federales y provocó retrasos en aeropuertos, recortes en programas de ayuda alimentaria y suspensión de pagos a cientos de miles de empleados. El alcalde de Miami, Francis Suárez, señaló que "el ‘shutdown’ impacta el turismo, el motor económico de Miami".
Sin embargo, el acuerdo no resolvió el punto central del conflicto: la extensión de los subsidios a la cobertura médica conocidos como Obamacare. Aunque el Senado debatirá este tema en diciembre, el presidente de la Cámara, Mike Johnson, no asumió compromisos. "Los republicanos exigirían muchas reformas antes de que algo así fuera posible", afirmó.
La mayoría de los legisladores demócratas votó en contra del paquete por considerar que no ofrecía garantías sobre los subsidios que vencen a fin de año. "No podemos apoyar el intento republicano de desmantelar la atención médica del pueblo estadounidense", expresó el líder demócrata Hakeem Jeffries . Por su parte, el representante republicano Tom Cole afirmó: "la historia nos recuerda que los cierres gubernamentales nunca cambian el resultado, solo el costo que paga el pueblo estadounidense".
Durante el último día de sesión, la representante demócrata Mikie Sherrill, recientemente elegida gobernadora de Nueva Jersey, se despidió con un mensaje crítico a la administración. "No permitan que este organismo se convierta en un sello rojo ceremonial de una Administración que les quita la comida a los niños y les arrebata la atención médica".
El acuerdo solo cubre parcialmente el presupuesto y extiende la financiación hasta el 30 de enero. Aunque los servicios federales fueron reactivados, el conflicto legislativo permanece abierto, sin garantías sobre futuras negociaciones ni sobre la continuidad de programas sociales clave. (NotiPress)
